Gracias por hacerme Taurino

Gracias Madre, gracias Padre por concebirme de tal manera que mi ser haya sido bañado por la luz lactea del signo mas brillante de todos. Gracias por haberlo hecho sin protección en Agosto. Realmente solo la fuerza del toro puede conducir a esos dos ateos agnósticos superzurdos "anti-todo lo que no se pueda ver con los ojos ni con el sentido común" a cumplir con sus necesidades sensuales en tan atinado momento, y de tan atinada manera. Ojalá hayan disfrutado de ese momento sexual con toda la furia del fuego venusino que hoy arde violentamente en el núcleo de mi corazón. Gracias también a la pachamama y al universo, por arreglar el resto de los asuntos y terminar de configurar mis características astrales con perfección milagrosa. En definitiva, gracias al Universo, a la Tierra y a mis Padres, por hacerme Taurino.

El gran astrónomo polaco Johannes Hevelius, célebre por sus precisas mediciones estelares a ojo desnudo, representó de esta manera el sector del cosmos que es cuna de la magia taurina.