4 ago 2009

Shiny Happy People

Ayer la hermana taurina Venecia me tiró un dato vital: Keith Haring era un T-Bro. Y vaya si tiene sentido! Esa obra repop con gran influencia cartoon y tan sobrecargada siempre de mensajes de unidad, de paz, de hermandad, de mala onda con el establishment y la desigualdad, tenía que estar hecha de Tauro: no quedaba otra. Caramelos dulces rellenos de jugo ácido de psilocibina para el ciudadano moderno que mira para el otro lado. Hail Keith!

OK, bro!